Hoy es Hallowen, una fiesta que habiendo nacido en Irlanda se ha echo famosa en Estados Unidos. Mucho ha cambiado esa fiesta.En su origen era la fiesta de Shamain, fiesta de los muertos, y como en la de Beltane, su opuesta, se encendían hogueras en las cimas de las colinas aunque en esta ocasión era en el crepúsculo, en la oscuridad. El ganado, riqueza celta, se conducía hacia la hoguera principal con el fin de iniciar el ritual de protegerlo y bendecirlo con su paso por entre las llamas y el humo. Cuando comenzaba el banquete, algunas tribus tenían por costumbre dejar un hueco entre los comensales para los fallecidos que quisieran unirse al banquete.
La comida, de una forma u otra tenia su importancia.Algunos dejaban comida preparada en un espacio a ellos destinado, con la terminante prohibición de que nadie tocara, ni tomara esos alimentos, mientras durasen los festejos.En Gales está comida recibía el nombre de "la comida para la embajada de los muertos" (bwyd cennad y meirv), en Bretaña era "la comida para la fiesta de los muertos" (boued gouel an Anaon). Mientras otras se convertían en el papel simbólico de embajadores de los muertos, conocidos con el nombre de "cenhadon y meirv". Estos individuos iban de hogar en hogar demandando la comida para los difuntos, que los anfitriones preparaban para la ocasión, recibían el nombre de "tortas de almas" o "pice rhanna"(Gales), las cuales comerían como representantes carnales de los parientes difuntos del anfitrión. En este caso, la comida de los muertos no era tabú, sino que al contrario se convertía en una manifestación de solidaridad, a la par que un fortalecimiento de la tribu.