Se cree que fue el 11 de Julio de 1987 cuando el número de personas que convivimos en el planeta Tierra llegó a ser de 5000 millones. A partir de ese año, se celebra hoy el día mundial de la población. Es un día apropiado para recordar los problemas demográficos que sufren algunos países. El alto crecimiento demográfico crea problemas relacionados con el recursos disponibles y un dilema moral sobre como se debe actuar ante el medio ambiente. Se crea la dualidad desarrollo incontrolado- crecimiento sostenible respetando el medio ambiente.
Mario Benedetti escribió este poema sobre este día:
El niño cinco mil millones
En un día del año 1987
nació el niño Cinco Mil
Millones. Vino sin etiqueta,
así que podía ser negro, blanco,
amarillo, etc. Muchos países,
en ese día, eligieron al
azar un niño Cinco Mil
Millones para homenajearlo y
hasta filmarlo y grabar
su primer llanto.
Sin embargo, el verdadero
niño Cinco Mil Millones no
fue homenajeado ni filmado
ni acaso tuvo energías para
su primer llanto. Mucho
antes de nacer ya tenía hambre.
Un hambre atroz. Un
hambre vieja. Cuando por fin
movió sus dedos, éstos tocaron
la tierra seca. Cuarteada
y seca. Tierra con grietas y
esqueletos de perros o de
camellos o vacas. También
con el esqueleto del niño
número 4 999 999 999.
El verdadero niño Cinco
Mil Millones tenía hambre y
sed, pero su madre tenía más
hambre y más sed y sus
pechos oscuros eran como
tierra exhaustada. Junto a ella,
el abuelo del niño tenía hambre
y sed más antiguas aún y
ya no encontraba en sí
mismo ganas de pensar o de
creer.
Una semana después, el
niño Cinco Mil Millones era
un minúsculo esqueleto y en
consecuencia disminuyó en
algo el horrible riesgo de que
el planeta llegara a estar superpoblado.