martes, junio 23, 2009

Popeye: un marinero con clase

Empezaba el año 1929. En ese momento nadie se podía imaginar que el octubre de ese año sería tristemente conocido. Antes que todo eso pasara el mundo seguía viviendo alocadamente esos maravillosos años 20. La gran guerra había terminado y era momento de divertirse.
En ese contexto histórico nació uno de los marineros más famosos de la historia. No, no me he equivocado de fechas porque no estoy hablando de Chanquete. Estoy hablando de Popeye. Ese hipermusculado marinero adicto a las espinacas. Al principio no era un personaje importante ya que era un personaje secundario pero poco a poco fue ganando protagonismo. El pobre sufrió la muerte de su "padre" pero pronto le iban a surgir otros. Este personaje se prodigaría en comics y en dibujos animados. Todas las madres tuvieron un aliado en él a la hora de dar de comer a sus niños las odiadas espinacas. Tenía una peculiaridad: muchas veces uno sabía como empezaba y terminaba la historia. Bluto intentaba ligarse a Oliva, ella le rechazaba. En ese momento él la secuestra. Popeye se entera y va en busca de su amada. En ese primer momento el rescate no sale precisamente bien. Más bien sale rematadamente mal: Popeye sale muy herido. El problema siempre tenía la misma solución: comer espinacas. Y siempre funcionaba. Popeye ganaba al malo y rescataba a Oliva. No sé la razón pero este argumento me recuerda mucho al argumento de alguna película de Jean-Claude Van Damme)
Por cierto ¿alguien se acuerda de la canción?