La gente tiene muchas maneras de pasar una mañana del sábado... ¿no? pues... ¿por qué no pasarlo en compañía de mucha gente reunidos todos en mismo lugar convocados por unas mismas personas...? ¿Un concierto quizás, un evento deportivo o cultural? Pues no... era una prueba para una bolsa de trabajo... ya.. ya.. lo se... no es algo ni divertido, ni entretenido, ni agradable... pero si que es una forma de pasar la mañana como otra cualquiera.
Es curioso, debe ser la ley de murphy pero cuando voy a esa universidad siempre me pasa lo mismo. Hay dos entradas a un pasillo donde hay por dos puertas. Pues siempre entro por uno de los lados del pasillo... pues la puerta es la del final del mismo. Y si entro por la contraria... pues la puerta sigue siendo la del final del pasillo. ¿Alguna vez acertaré?, supongo que si me acordará de como van las aulas si.
Llegamos al aula donde se supone que tenemos la prueba. Unos llegamos temprano y nos da tiempo para mirar en el tablón en que posición estamos. Ver cuanta gente tenemos delante y así hacernos una idea de lo que tendremos que esperar en la convocatoria pública. Hay gente que se conoce que se saluda, otros miramos al vacío esperando que llegue la hora. Algunos pocos parecen que de tanto estudiar le cogieron apego a los apuntes y claro no los iban a dejar solos en casa mientras hacen la prueba.
Otros llegan con la hora justa y, o llegan justo cuando empiezan a llamar o cuando ya empezó. Puede que tengan suerte y no le hayan llamado ya... Pero como ya hayan llamado...lo siento amigo/a toca esperar hasta el final del todo. Lo del llamamiento tiene su intríngulis. La persona empieza a llamar, que por cierto nunca entendí como se puede enterar las primeras personas de la lista con el barullo que hay de gente hablando por ahí. Supongo que cuando la ven salir ya están preparados para entrar. Con varios bolis, por si alguno falla, lápiz, goma... y si llevan apuntes casi que acaban necesitando llevar el dni entre los dientes cual espada de corsario. Bueno, la gente que sigue en la lista se da cuenta de que empiezan a llamar. Se forma una especie de semicírculo donde uno intenta hacer un esfuerzo por escuchar por qué apellido van. Bueno... y también para ir viendo quien es quien.
Entiéndaseme, van diciendo un nombre y apellido y uno espera a que esa persona entre al examen. Pura curiosidad... Miras a las personas y haces cabalas de como se puede llamar. Yo doy gracias de no tener un nombre o apellidos curiosos o que hagan una rima un tanto indeseable de repetir en público. Entramos en la clase, nos miran el carnet no vaya a ser que mandemos a otro en nuestro lugar... (Pero si mandamos a nuestro/a hermano/a gemelo... ¿lo notarían?)
Te ponen una hoja delante, hay un sitio para poner el dni. Esta es la parte Barrio Sesamo del examen: si pones un 1, luego rellenas el rectángulo del 1, si es un 2 la del 2... Aunque supongo que si vas algo nervioso es probable que exista alguna equivocación. Tienes que estar un buen rato con el examen boca arriba hasta que todos estén repartidos. Supongo que superman tendría algo de ventaja en situaciones como esta. Y hablando de esto... ¿Superman copiaría alguna vez en un examen? Bueno sigamos con el tema que me lleva a escribir esto.
Los cuadritos es algo que no me gustó nada el examen de hoy. Ya es bastante lo de saber la respuesta correcta (o bueno intentar saber cual es), pero es que encima tienes que rellenar muchos cuadraditos pequeños sin salirte de la línea. Vaya... esa debía ser una de las utilidades de aquellos dibujos que había que hacer en parvulitos sin salirse de la línea. Por fín un lugar donde plasmar todos esos conocimientos. A mi me entró en duda si alguna pregunta quedaría invalidada si me hubiera pasado algunos milímetros de la línea del cuadradito.
Cuando ya terminamos el examen tenemos que volver a esperar porque no se puede uno marchar cuando se termina el examen antes de tiempo. Asi que, si alguien hace el examen muy rápido tiene que, o repasar el examen o intentar pasar el rato sin hacer creer a los vigilantes que estas copiando porque sino la tienes liada. Terminado el tiempo, otra vez llamamiento, pero esta vez al revés. En este punto, por alguna extraña razón me recordó a una entrega de diplomas (aunque quienes entregáramos algo fuéramos nosotros) y me daban ganas de aplaudir en cada uno de los llamamientos. Cosas raras mías. Y aquí termina el post sobre esta mañana del sábado, que por cierto que largo me salió (¿alguien llegó hasta aquí? muchas gracias.) No esta terminado porque falta saber la resolución de la prueba pero ya casi podría anticiparlo siendo un poco pitonisa. Me alegraría equivocarme.
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