miércoles, agosto 06, 2008

Traduciendo al mejor amigo del hombre

Yo no tengo perro, tengo una tortuga pero supongo que alguna de las personas que lea este texto lo tendrá. Por un simple razonamiento estadístico. Todos los animales se comunican con nosotros. Algunos se hacen entender mejor que otros: por ejemplo mi tortuga ganaría un concurso de poker pero no es muy comunicativa en lo relativo a gestos. En el caso de las perros tienen la costumbre de ladrar. Pero claro, ladran para todo. ¿cómo sabemos lo que significa cada uno de los ladridos. Sí, bueno se puede analizar sus movimientos (está claro que si un perro nos enseña los dientes no es que nos haya confundido con un dentista canino), el tono del ladrido... Pero, ¿y si queremos estar seguros al 100 % de lo que quiere? No vaya a ser que solamente esté aburrido y nosotros pensemos que está hambriento. Pobre animalito, sería fatal para su dieta. Pues solamente necesitamos comprar un aparato traductor para perros. (lo sé quizás se necesitaría un traductor de esos para algunas personas, pero creo que todavía no se ha inventado)
Aquí tenemos el invento en cuestión:
2008-08-06_233349
¿que fiabilidad puede tener? Si no sabemos lo que dice el perro ¿Cómo saber que el traductor está diciendo la verdad? ¿alguno que tenga perro lo compraría? Si la respuesta es sí hay una pequeña pega. Por lo visto solamente se vende en Japón y por el módico precio de $100. Pero, ¿qué es un viajecito a Japón y gastar esa menudencia comparado con poder saber lo que dice el perro de la familia? En caso de duda, sácalo a la calle antes de que se lo haga en casa.
Fuente: TIME


2 comentarios:

Juan Carlos dijo...

para mujeres dijiste que no había no???


jaja a veces, uno desearía por un día ser mel gibson en "lo que piensan las mujeres" aunque no sé si la experiencia sería del todo agradable xD

Motime dijo...

No creas que no sería también muy util algo parecido para los chicos eh? jejeje
Lo de saber lo que piensan los demás siempre me pareció algo deseable pero seguramente, como dices tú, no creo que sea nada agradable de experimentar. No